Contiene la flor y la nata, por decirlo así, de los escritos de San Agustín; se encuentra un tratado completo de la vida cristiana, compuesto, no solo según la doctrina y conceptos, sino con las palabras mismas de este gran Doctor de la Iglesia. Este libro, por tanto, ha de ser de gran interés, no solo para la instrucción ascético–religiosa, sino también para la meditación y la oración.