La persona que recibió este mensaje es esposa y madre de familia a quien, por discreción, la presentamos con un seudónimo: Margarita.
La enseñanza contenida en el Mensaje, que es una serie de coloquios entre Nuestro Señor y Margarita, se caracteriza por su sencillez, su nitidez.
Graves avisos al mundo amenazado de una catástrofe sin igual causada por el hombre mismo, avisos no menos severos a los responsables de la Iglesia (los lobos disfrazados con piel de oveja, los falsos pastores), están contenidos en el Mensaje.
Se caracteriza por su actualidad y por su urgencia. La fuerza del Mensaje, el vigor de ciertas palabras que revelan la indignación del Señor impresionarán al que lo lee, pero al mismo tiempo nos invitan, más bien, a una esperanza llena de confianza.