La mal llamada “teoría” –“enfoque”, “mirada”, etc.– de “género” es, en realidad una ideología. Probablemente la ideología más radical de la historia, puesto que –de imponerse–, destruiría al ser humano en su núcleo más íntimo y, simultáneamente acabaría con la sociedad. Como toda ideología, no busca la verdad ni el bien de los demás, sino solamente la conquista de sus voluntades. Utiliza el engaño como un medio imprescindible para alcanzar su finalidad. Esta ideología tiene varias locuciones que utiliza para manipular hábilmente el lenguaje. La principal es la palabra que la denomina, es decir el vocablo género. Además, en una compleja articulación utiliza otros términos, que le resultan convenientes para completar la argumentación ideológica. Entre ellos: opción sexual, igualdad sexual, derechos sexuales y reproductivos, salud sexual y reproductiva, “derecho” al aborto, embarazo no deseado, “tipos” de familia, “matrimonio” homosexual, “heterosexualidad obligatoria”, “homofobia”, etc. Se trata de un nuevo lenguaje, de características esotéricas, cuya función es asegurar la confusión. La ideología de género trata de imponer una nueva antropología, que es el origen de una nueva cosmología, y que provoca un cambio total en las pautas morales de la sociedad. Este libro pretende despertar conciencias aletargadas, y ayudarlas a trabajar por un mundo mejor. Pese a ser un trabajo de divulgación, el autor presenta cada una de sus tesis, con el apoyo de citas de cultores del género, dotándolo de objetividad.
Número de páginas: 346
Dimensiones: 12,5 x 19 cm.
Peso: 10,55 oz. (299,1 gr.)
"Trabajamos para la gloria de Dios y la salvación de las almas"
Nuestra Fundación distribuye literatura cristiana de varias Editoriales Católicas de Hispanoamérica, pero de una manera particular, difunde su propio fondo editorial, en el que constan las grandes obras de Espiritualidad Cristiana.
"San Miguel Arcángel,
defiéndenos en la batalla.
Sé nuestro amparo
contra la perversidad y asechanzas
del demonio.
Reprímale Dios, pedimos suplicantes,
y tú Príncipe de la Milicia Celestial,
arroja al infierno con el divino poder
a Satanás y a los otros espíritus malignos
que andan dispersos por el mundo
para la perdición de las almas.
Amén."