La Virgen María se ha manifestado en cientos de lugares en los últimos 150 años y ha dado a los hombres un gran conjunto de advertencias proféticas para orientarlos y protegerlos en esta dura etapa de nuestra historia. Expone las promesas de protección espiritual y física que Dios nos hace para pasar esta etapa: la Consagración al Inmaculado Corazón.