En este libro queremos tratar el tema de la confesión y, a la vez, presentar a Don Bosco como un apóstol de este sacramento. En su trabajo de educador con los jóvenes, comprendió que para ayudarles a cambiar de vida y mantener una vida sana era necesario inculcarles la confesión y Comunión frecuentes. Por eso, dedicó muchas horas de su vida a confesar a sus jóvenes y a todas las personas que acudían a él de todas partes. La experiencia de Don Bosco y los consejos que daba a los jóvenes pueden ser útiles también a la gente de este siglo XXI tan necesitada de Dios. Ojalá que la lectura de estas páginas estimule a los lectores a confesarse y a recibir a Jesús Eucaristía frecuentemente para crecer cada día más en el camino de la santidad.