San Juan Bosco es uno de los Santos más extraordinarios del santoral católico. Su amor a Jesús Eucaristía y a la Virgen fueron las características más sobresalientes de su vida. En su vida se cuentan muchos casos de bilocación, resplandores sobrenaturales, conocimiento sobrenatural de las cosas y milagros por centenares. Su devoción al Ángel Custodio la inculcaba mucho a los jóvenes, a quienes recomendaba mucho la Confesión y Comunión frecuentes para superar las tentaciones. San Juan Bosco es un Santo muy actual, especialmente para los jóvenes, de quien es padre y maestro. Fue un gran taumaturgo, místico y apóstol: tres palabras para designar su extraordinaria santidad. Él nos marca el camino hacia Dios, pues nos enseña por experiencia que el Evangelio se puede vivir en plenitud y que todo lo que Dios nos enseña en él, por medio de la Iglesia, es verdad. En resumen, leyendo la vida de San Juan Bosco, nuestra fe se estimula y nuestro amor a Dios y al prójimo crece. Es como si nos dijera a cada uno que la santidad no es un privilegio de unos pocos, sino un deber de todos.